La Asociación Colegial de Escritores y la Escuela de Escritores han reclamado que la creación literaria se incluya en la ley de enseñanzas artísticas. Ambas entidades solicitaron este reconocimiento durante la entrega del IV Premio Ángel María de Lera al Fomento de la Labor del Escritor y de la Lectura que la Asociación Colegial de Escritores ha concedido en esta ocasión a la Escuela de Escritores. La propuesta la realizaron tanto el presidente de la Asociación Colegial de Escritores, Manuel Rico, que subrayó que la creación literaria debería ser una disciplina más en la ley de enseñanzas artísticas «en igualdad de condiciones con las ya existentes», como el director de la Escuela de Escritores, Javier Sagarna.
La entrega del galardón de la Asociación Colegial de Escritores se realizó en la sede del Instituto Cervantes en Madrid y con la presencia del subdirector de Cultura de la institución, Ernesto Pérez Zúñiga. En representación del ministro de Cultura y Deporte, Ernest Urtasun, acudió al acto la directora general del Libro, el Cómic y el Fomento de la Lectura, María José Gálvez. «Debemos dignificar a los creadores, a escritores y a traductores. Se va a continuar en esta legislatura con el Estatuto del Artista. Y tiene que existir formación y se tienen que dar unas condiciones dignas para poder trabajar», manifestó Gálvez. «Uno de los pilares es dotar de prestigio a la creación literaria, lo hace este premio y lo hacéis desde la Escuela de Escritura», añadió.
Manuel Rico: «Toda guerra nos aleja de la cultura, de la literatura y de sus capacidades para difundir valores y principios humanísticos»
El presidente de la Asociación Colegial de Escritores, Manuel Rico, recordó que fue el escritor Ángel María de Lera y un puñado de escritores los que crearon la asociación en los estertores de la dictadura y que solo se pudo legalizar con la democracia. «Decidieron organizarse para defender la propiedad intelectual y los derechos de los autores y de las autoras, también la paz y la libertad, comenzando por la plena libertad de expresión», expuso. Subrayó que ahora también se viven tiempos difíciles, tras los atentados terroristas de Hamás y por los bombardeos indiscriminados que se están realizando contra la población civil palestina. «Los escritores nunca hemos sido ajenos a cuanto se relaciona con la condición humana. Hacemos votos porque se detenga esa locura, porque se instaure un alto al fuego permanente y porque los mandatos de la ONU, a pesar de los vetos, desplieguen un horizonte de paz y convivencia. Toda guerra nos aleja de la cultura, de la literatura y de sus capacidades para difundir valores y principios humanísticos».
Manuel Rico también recordó que la Asociación Colegial de Escritores tiene entre sus principios la defensa de los derechos de autor, la protección social de los escritores y la salvaguarda «de la labor de los autores y autoras literarios frente a amenazas que pueden tocar el corazón de nuestro oficio, como la llamada inteligencia artificial y la utilización perversa de sus instrumentos».
Javier Sagarna: «Amamos la escritura y amamos la enseñanza, estamos convencidos de que se puede enseñar a escribir y nos encanta hacerlo».
El director de la Escuela de Escritores, Javier Sagarna, manifestó su agradecimiento por el premio, que se ha concedido por unanimidad del jurado, así como alabó la labor del profesorado y del equipo de la Escuela de Escritores. «Este premio es más que una alegría, es un estímulo, nos da ímpetu para seguir hacia adelante todavía con más ganas en este empeño que es el de ser referente en la formación de escritores en todo el mundo hispanohablante». La Escuela de Escritores ha cumplido veinte años dedicada a la enseñanza de la creación literaria y Sagarna señaló que el objetivo de sus promotores fue «crear la escuela en la que nos hubiera gustado poder estudiar». «Son muchos los alumnos que encuentran en la Escuela de Escritores la guía para cumplir su deseo de ser escritores, el camino para construir y desarrollar su oficio y el entorno donde hacer crecer su talento», añadió. «Amamos la escritura y amamos la enseñanza, estamos convencidos de que se puede enseñar a escribir y nos encanta hacerlo».
El Premio Ángel María de Lera al Fomento de la Labor del Escritor y de la Lectura lo han recibido también las bibliotecas públicas de Fuenlabrada y de Navarra, y las librerías de Urueña. En el jurado del premio hay representantes de todo el sector del libro, desde la propia Asociación Colegial de Escritores a la Federación de Gremios de Editores, la Asociación Española de Críticos Literarios, Cegal, la Fundación Germán Sánchez Ruipérez y el Centro Español de Derechos Reprográficos, Cedro.
Por parte de esta última entidad acudió a la entrega del premio su presidenta, Carme Riera, que destacó el nexo de la Escuela de Escritores con los países hispanohablantes. «A lo largo de dos décadas, la Escuela de Escritores ha contribuido de forma decisiva en la formación de autores en escritura creativa y también en la promoción de la lectura». Riera destacó también los más de veinte mil alumnos que han pasado por la Escuela de Escritores. «Quienes escribimos lo hacemos para conocer mejor el mundo y, como Sherezade, también lo hacemos para no morir», afirmó.
Puedes ver el acto de Entrega del IV Premio «ACE – Ángel María de Lera» a la Escuela de Escritores en nuestro canal de youtube